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Profesión u oficio: Artista
Lugar y fecha de nacimiento: En Rancagua el 9 de octubre de 1967
Cecilia Astorga, nació en Rancagua, Chile, el 9 de octubre de 1967. Desde pequeña canta como solista y en dúo con su hermano Francisco, cuecas, tonadas y valses populares y campesinos. En 1992 se une a Pedro Yáñez, interpretando y creando canciones. También cultiva el canto en décimas a lo divino y a lo humano, destacándose como la primera mujer en Chile que se sube a los escenarios como payadora. Desde el año 1998 lo hace profesionalmente, impresionando por su canto y su calidad poética, recorriendo importantes escenarios a lo largo de Chile y fuera del país (Argentina, Uruguay y Panamá). Ha participado en los discos "El jardinero y la flor" del sello Alerce, año 1994 y "Encuentro Internacional de Payadores", también de Alerce, año 2002.
En el año 2009 recibe la beca de creación literaria del Fondo del libro y la lectura para su obra “Décimas a lo divino”, además de dirigir un taller de poesía popular en Santiago y realizar clases particulares, a grupos folclóricos e interesantes jornadas virtuales.
Verso escogido
Vuelvo a sentirme preciosa.
AMO MIS DEDOS HABLANTES
EN UNA NOCHE DESPIERTA
AMO LA ILUSIÓN INCIERTA
CON SILENCIOS ABUNDANTES.
Hoy me perdí ciegamente
entre unas cuerdas finísimas
las melodías bellísimas
le dieron luz a mi fuente.
Por fin, brotaba el torrente
olvidado en los instantes
de ausencia de los amantes
vencidos por el dolor
me decía el trovador
AMO MIS DEDOS HABLANTES.
Vuelvo a sentirme preciosa
en mis rincones desnuda
hasta que mi amante acuda
a convertirme en su esposa.
Como un jarrito de loza
soy frágil y descubierta,
en mi ingenuidad abierta
presente y tan necesaria
me acostaré solitaria
EN UNA NOCHE DESPIERTA.
Mis brazos están caídos
y mis ojos, sin los tuyos
mas, escucho los murmullos
de milenarios sonidos.
Mis sentidos, tus sentidos
me hacen valiente y alerta
te veo cruzar la puerta
en las horas del ocaso
por mientras, en mi regazo
AMO LA ILUSIÓN INCIERTA.
Estabas tan lejos, lejos
y te sentía cerquita
mi letra estaba bendita
mirándose en tus espejos.
Te mantendré en mis reflejos
hasta el momento en que cantes
y sientas quietas y errantes
mis lágrimas y mis yemas…
me quedo entre mis poemas
CON SILENCIOS ABUNDANTES.
